SOY IGUAL QUE TÚ, ¿NO LO CREES ASÍ?
¡Hola! Me llamo Karina y tengo 14 años. Estudio en el Colegio Nacional “Manuel Prado”, en la ciudad de Puquio, en el Departamento de Ayacucho y estoy en cuarto año. Soy una persona especial y esta es mi historia:
A los cuatro años, cuando no me daba cuenta de las cosas muy bien, mis papás se fueron al cielo y, por cierto, no se imaginan cuanto los extraño y la falta que me hacen. Dos años después, mis bisabuelitos me trajeron con ellos y hasta el día de hoy vivo con ellos. Se podría decir que soy feliz porque los tengo a ellos y me aceptan como soy, así como en el colegio, aunque a veces me siento un poco mal por no poder hacer las cosas que los demás hacen, como es jugar vóley, montar bicicleta, nadar en la piscina. Felizmente mis compañeros de clase y mis profesores del colegio me aceptan como soy, aunque yo no entiendo por que hasta hace dos años, me habían puesto en un colegio de educación especial “Inmanuel Kant”, si yo mentalmente no estoy mal.
¿Qué es lo que tengo? y ¿Por qué? No lo sé, bueno ningún doctor me ha explicado, pero tengo una malformación física en la pierna y el brazo derecho que me impide hacer todas esas cosas que he mencionado. Pero, ¿saben qué? Me gusta mucho dibujar y también escribir; y cuando escribo, pienso en todas esas personas que como yo tienen algo especial, porque lo que yo tengo lo considero algo especial, algo que Dios me ha dado para ver si soy fuerte y logro superarlo con otras cosas.
Por las noches, pienso en todas esas personas que son como yo y me pongo triste porque muchas veces la sociedad nos diferencia de ellos y creen que no servimos para nada y por eso nos aíslan físicamente y también socialmente, no saben que somos personas con mucha sensibilidad, capaces de comprender a los demás. Creen que porque tenemos “defectos” (así lo llaman ellos), deben decidir por nosotros.
Todo esto, la sociedad lo cree y lo piensa, sin tener en cuenta que nosotros también tenemos derechos como a ser escuchados, aceptados e integrados dentro de un grupo social.
¡Basta ya de tantas injusticias!
Nosotros también tenemos presencia física como ustedes, queremos ser integrados socialmente, sin prejuicios ni temores. Dennos la oportunidad de desarrollar otras habilidades que también tenemos, trátennos como personas de nuestra edad, pero sobretodo, dennos la oportunidad de tomar decisiones y así poder ser independientes como ustedes.
Porque…
Soy igual que tú, ¿no lo crees? .
Seudónimo : FLOR DE CCANTU
Lugar : 1er. Puesto. – 2001: IV CEN
Nombre : Elizabeth Karina Saire Rocha
Colegio : Manuel Prado – AYACUCHO.
LOS DISCAPACITADOS NO SON UNA CLASE APARTE
Estamos en el siglo XXI y aún existe discriminación hacia las personas discapacitadas, tanto físicas como mentales (estas suelen ser consecuencias de accidentes, enfermedades o anomalías congénitas), muchas veces son objeto de burla o tomados para insultar a otras personas… lamentablemente, es usual menospreciar a otro con la palabra “retrasado o mongolito”. La mayoría los mira como fenómenos, sin darse cuenta que son personas como todos, que piensan, que sienten y el hecho de que tengan algún defecto físico o retardo sicomotriz no los hace menos, no les impide sentir dolor ni cólera; cuán responsables somos los que nos llamamos normales de que sientan rechazo por sí mismos. Nos tiene que pasar, nos tiene que rozar para que los miremos con otros ojos. Es por eso que el mayor reto para los discapacitados ha sido y es, convencer a la sociedad de que NO SON UNA CLASE APARTE.
Es nuestro deber sensibilizar, mostrar y hacer saber sus derechos. Los discapacitados en la mayor de los casos tienen dificultad para ciertas actividades… viajar en transporte público, subir escaleras o incluso utilizar ciertos electrodomésticos. Ellos tienen derecho a ser evaluados por sus méritos personales, no por ideas estereotipadas sobre discapacidades; a conseguir que la sociedad realice cambios que les permitan participar con más facilidad en la vida empresarial y social (facilitar el acceso de sillas de ruedas, al transporte público, a edificios y a espectáculos) y finalmente, en la medida de lo posible, integrarse con la población capacitada.
Tienen derecho a un programa de rehabilitación social, que debe incluir servicios médicos y psicológicos, ya que los problemas emocionales que pueden ir asociados a una discapacidad no han sido suficientemente valorados, así como a una formación para la incorporación al puesto de trabajo. La psicoterapia y el asesoramiento laboral pueden ayudar a una persona a sobrellevar los efectos de la discapacidad, favoreciendo su rehabilitación. TIENEN LOS MISMOS DERECHOS FUNDAMENTALES QUE SUS CONCIUDADANOS DE LA MISMA EDAD, al respeto de su dignidad humana, sin distingo de sexo, raza, color o religión; ningún ser humano es perfecto, ninguno tiene el perfecto binomio cuerpo-espíritu.
Hasta hace pocos años era difícil que la sociedad reconociera que los discapacitados (aparte de su defecto específico) tenían las mismas capacidades, necesidades e intereses que el resto de la población; por ello seguía existiendo un trato discriminatorio, había empresarios que se resistían a dar trabajo o promocionar a discapacitados, propietarios que se negaban y aún ahora se niegan a alquilarles sus casas y, tribunales que a veces privaban a los discapacitados de derechos básicos como los de custodia de los hijos, pero ahora se están haciendo ver sus derechos a través de distintos programas como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Sin embargo, aún el movimiento a favor de los derechos de los discapacitados ha encontrado una cierta oposición en grupos que consideran un coste prohibitivo realizar los cambios necesarios. Además, la ausencia de instalaciones que facilitarían la integración de los discapacitados a la vida pública es utilizada a veces por las personas capacitadas como excusa para ignorar este tema.
Está en nuestras manos hacer reconocer sus derechos, TODOS UNIDOS PODEMOS HACER DE ESTA UNA SOCIEDAD MEJOR, AYUDEMOSLOS, ELLOS CONFIAN EN NOSOTROS.
Seudónimo : AMOR Y PAZ
Lugar : 2do. Puesto – 2001: IV CEN
Nombre : Iris Emma Hidalgo Nicho
Colegio : San Vicente de la Barquera – HUANUCO.
PRIMERO PERSONA
¿Qué es lo que nos sugiere este título? Tal vez para algunos tenga un significado vacío, y solo sea un pensamiento que no llegó al corazón. Las flores y las plantas no sólo crecen en verdes campos, las palmeras crecen en la arena y sin embargo, como lo vemos, las maravillas de Dios están por doquier. Muchos de nosotros recorremos senderos sin ver el rostro del otro, sin darnos la mano, con un mundo distinto, con actitudes dormidas como el corazón. Todo nos habla de Dios, las flores, el perfume que acaricia el rostro de seres como tú, como él o como yo, el aire y bresca brisa que mece a nuestros cabellos, la misma brisa que mece las hojas y vemos cada cosa encaja perfecta, que establece un lugar y la armonía que quiso y viene de Dios. Todos somos un mundo distinto, con creencias distintas, con sentimientos despiertos y dormidos, pero nos asemeja el hecho de que somos personas, con sentimientos, emociones, sufrimos, amamos, reímos y lloramos a nuestra manera, desde ahí notamos de que somos diferentes, pero al ver que nuestro hermano en Dios es discapacitado físico o mentalmente; por más absurdo o superfluo que parezca, eso se convierte en el abismo de separación; palabras de pena, lástima o compasión, falsa piedad, máscaras que van y vienen, corazones que se alejan, espantados por las diferencias, porque creen que son extraños, diferentes o valen menos que nosotros. ¿Por qué creen que son diferentes? ¿Por qué creen que valen menos? Habría que comparar y ver quién valora, quién comprenda, a quién es más agradecido, quién al cerrar las puertas del hogar le dice al ser querido con palabras que nacen en el corazón “Te quiero” “Gracias” y rompe barreras y diferencias…
Tenemos que ver antes que lo que nos aleja, lo que nos une, ver ante todo el corazón, por encima de esas diferencias físicas, no ver los defectos físicos, sino ante todo que es una persona, ser capaz de ver más allá de las diferencias físicas, más allá de esa fachada engañosa llamada cuerpo humano, porque ante todo es una persona, como nosotros.
No tengamos miedo de soñar, de amar. Demos el primer paso incorporando a los hermanos discapacitados en la sociedad, hagamos respetar sus derechos. Una sonrisa esbozar nada nos cuesta, parece poquito pero nos acerca y nos hace felices.
Ojalá que la comprensión acompañe a esa sonrisa, ayudemos a los valientes hermanos discapacitados.
Seudónimo : NEKU 2
Nombre : Johana Montalván Castilla¡Hola! Me llamo Karina y tengo 14 años. Estudio en el Colegio Nacional “Manuel Prado”, en la ciudad de Puquio, en el Departamento de Ayacucho y estoy en cuarto año. Soy una persona especial y esta es mi historia:
A los cuatro años, cuando no me daba cuenta de las cosas muy bien, mis papás se fueron al cielo y, por cierto, no se imaginan cuanto los extraño y la falta que me hacen. Dos años después, mis bisabuelitos me trajeron con ellos y hasta el día de hoy vivo con ellos. Se podría decir que soy feliz porque los tengo a ellos y me aceptan como soy, así como en el colegio, aunque a veces me siento un poco mal por no poder hacer las cosas que los demás hacen, como es jugar vóley, montar bicicleta, nadar en la piscina. Felizmente mis compañeros de clase y mis profesores del colegio me aceptan como soy, aunque yo no entiendo por que hasta hace dos años, me habían puesto en un colegio de educación especial “Inmanuel Kant”, si yo mentalmente no estoy mal.
¿Qué es lo que tengo? y ¿Por qué? No lo sé, bueno ningún doctor me ha explicado, pero tengo una malformación física en la pierna y el brazo derecho que me impide hacer todas esas cosas que he mencionado. Pero, ¿saben qué? Me gusta mucho dibujar y también escribir; y cuando escribo, pienso en todas esas personas que como yo tienen algo especial, porque lo que yo tengo lo considero algo especial, algo que Dios me ha dado para ver si soy fuerte y logro superarlo con otras cosas.
Por las noches, pienso en todas esas personas que son como yo y me pongo triste porque muchas veces la sociedad nos diferencia de ellos y creen que no servimos para nada y por eso nos aíslan físicamente y también socialmente, no saben que somos personas con mucha sensibilidad, capaces de comprender a los demás. Creen que porque tenemos “defectos” (así lo llaman ellos), deben decidir por nosotros.
Todo esto, la sociedad lo cree y lo piensa, sin tener en cuenta que nosotros también tenemos derechos como a ser escuchados, aceptados e integrados dentro de un grupo social.
¡Basta ya de tantas injusticias!
Nosotros también tenemos presencia física como ustedes, queremos ser integrados socialmente, sin prejuicios ni temores. Dennos la oportunidad de desarrollar otras habilidades que también tenemos, trátennos como personas de nuestra edad, pero sobretodo, dennos la oportunidad de tomar decisiones y así poder ser independientes como ustedes.
Porque…
Soy igual que tú, ¿no lo crees? .
Seudónimo : FLOR DE CCANTU
Lugar : 1er. Puesto. – 2001: IV CEN
Nombre : Elizabeth Karina Saire Rocha
Colegio : Manuel Prado – AYACUCHO.
LOS DISCAPACITADOS NO SON UNA CLASE APARTE
Estamos en el siglo XXI y aún existe discriminación hacia las personas discapacitadas, tanto físicas como mentales (estas suelen ser consecuencias de accidentes, enfermedades o anomalías congénitas), muchas veces son objeto de burla o tomados para insultar a otras personas… lamentablemente, es usual menospreciar a otro con la palabra “retrasado o mongolito”. La mayoría los mira como fenómenos, sin darse cuenta que son personas como todos, que piensan, que sienten y el hecho de que tengan algún defecto físico o retardo sicomotriz no los hace menos, no les impide sentir dolor ni cólera; cuán responsables somos los que nos llamamos normales de que sientan rechazo por sí mismos. Nos tiene que pasar, nos tiene que rozar para que los miremos con otros ojos. Es por eso que el mayor reto para los discapacitados ha sido y es, convencer a la sociedad de que NO SON UNA CLASE APARTE.
Es nuestro deber sensibilizar, mostrar y hacer saber sus derechos. Los discapacitados en la mayor de los casos tienen dificultad para ciertas actividades… viajar en transporte público, subir escaleras o incluso utilizar ciertos electrodomésticos. Ellos tienen derecho a ser evaluados por sus méritos personales, no por ideas estereotipadas sobre discapacidades; a conseguir que la sociedad realice cambios que les permitan participar con más facilidad en la vida empresarial y social (facilitar el acceso de sillas de ruedas, al transporte público, a edificios y a espectáculos) y finalmente, en la medida de lo posible, integrarse con la población capacitada.
Tienen derecho a un programa de rehabilitación social, que debe incluir servicios médicos y psicológicos, ya que los problemas emocionales que pueden ir asociados a una discapacidad no han sido suficientemente valorados, así como a una formación para la incorporación al puesto de trabajo. La psicoterapia y el asesoramiento laboral pueden ayudar a una persona a sobrellevar los efectos de la discapacidad, favoreciendo su rehabilitación. TIENEN LOS MISMOS DERECHOS FUNDAMENTALES QUE SUS CONCIUDADANOS DE LA MISMA EDAD, al respeto de su dignidad humana, sin distingo de sexo, raza, color o religión; ningún ser humano es perfecto, ninguno tiene el perfecto binomio cuerpo-espíritu.
Hasta hace pocos años era difícil que la sociedad reconociera que los discapacitados (aparte de su defecto específico) tenían las mismas capacidades, necesidades e intereses que el resto de la población; por ello seguía existiendo un trato discriminatorio, había empresarios que se resistían a dar trabajo o promocionar a discapacitados, propietarios que se negaban y aún ahora se niegan a alquilarles sus casas y, tribunales que a veces privaban a los discapacitados de derechos básicos como los de custodia de los hijos, pero ahora se están haciendo ver sus derechos a través de distintos programas como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Sin embargo, aún el movimiento a favor de los derechos de los discapacitados ha encontrado una cierta oposición en grupos que consideran un coste prohibitivo realizar los cambios necesarios. Además, la ausencia de instalaciones que facilitarían la integración de los discapacitados a la vida pública es utilizada a veces por las personas capacitadas como excusa para ignorar este tema.
Está en nuestras manos hacer reconocer sus derechos, TODOS UNIDOS PODEMOS HACER DE ESTA UNA SOCIEDAD MEJOR, AYUDEMOSLOS, ELLOS CONFIAN EN NOSOTROS.
Seudónimo : AMOR Y PAZ
Lugar : 2do. Puesto – 2001: IV CEN
Nombre : Iris Emma Hidalgo Nicho
Colegio : San Vicente de la Barquera – HUANUCO.
PRIMERO PERSONA
¿Qué es lo que nos sugiere este título? Tal vez para algunos tenga un significado vacío, y solo sea un pensamiento que no llegó al corazón. Las flores y las plantas no sólo crecen en verdes campos, las palmeras crecen en la arena y sin embargo, como lo vemos, las maravillas de Dios están por doquier. Muchos de nosotros recorremos senderos sin ver el rostro del otro, sin darnos la mano, con un mundo distinto, con actitudes dormidas como el corazón. Todo nos habla de Dios, las flores, el perfume que acaricia el rostro de seres como tú, como él o como yo, el aire y bresca brisa que mece a nuestros cabellos, la misma brisa que mece las hojas y vemos cada cosa encaja perfecta, que establece un lugar y la armonía que quiso y viene de Dios. Todos somos un mundo distinto, con creencias distintas, con sentimientos despiertos y dormidos, pero nos asemeja el hecho de que somos personas, con sentimientos, emociones, sufrimos, amamos, reímos y lloramos a nuestra manera, desde ahí notamos de que somos diferentes, pero al ver que nuestro hermano en Dios es discapacitado físico o mentalmente; por más absurdo o superfluo que parezca, eso se convierte en el abismo de separación; palabras de pena, lástima o compasión, falsa piedad, máscaras que van y vienen, corazones que se alejan, espantados por las diferencias, porque creen que son extraños, diferentes o valen menos que nosotros. ¿Por qué creen que son diferentes? ¿Por qué creen que valen menos? Habría que comparar y ver quién valora, quién comprenda, a quién es más agradecido, quién al cerrar las puertas del hogar le dice al ser querido con palabras que nacen en el corazón “Te quiero” “Gracias” y rompe barreras y diferencias…
Tenemos que ver antes que lo que nos aleja, lo que nos une, ver ante todo el corazón, por encima de esas diferencias físicas, no ver los defectos físicos, sino ante todo que es una persona, ser capaz de ver más allá de las diferencias físicas, más allá de esa fachada engañosa llamada cuerpo humano, porque ante todo es una persona, como nosotros.
No tengamos miedo de soñar, de amar. Demos el primer paso incorporando a los hermanos discapacitados en la sociedad, hagamos respetar sus derechos. Una sonrisa esbozar nada nos cuesta, parece poquito pero nos acerca y nos hace felices.
Ojalá que la comprensión acompañe a esa sonrisa, ayudemos a los valientes hermanos discapacitados.
Seudónimo : NEKU 2
Lugar : 3er. Puesto – 2001: IV CEN
Colegio : Nuestra Señora de Lourdes
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